La actividad emprendedora del colectivo inmigrante es cada vez más importante, en el 2006 supusieron ya un 7.09% de los emprendedores. Por regla general son personas con estudios universitarios, y la media de años de residencia, hasta que se deciden a emprender, ha bajado de los 12 a los 7 años.
A la vista de este crecimiento y de las peculiaridades de este colectivo, los expertos sugieren abrir nuevas fórmulas de financiación y apoyo a sus iniciativas desde las cámaras de comercio, asociaciones empresariales y direcciones generales. En general, se puede decir que el emprendedor inmigrante tiene menos miedo al fracaso que su homólogo español y según los expertos, tienen “mayor iniciativa y crea la empresa por necesidad”.
Los inmigrantes que llegan a España por necesidad prefieren abrir sus negocios dentro del ámbito de la hostelería y servicios a la empresa, seguidos de los de manufactura y los servicios personales-sector en el que emprenden más que el resto de los españoles-. Los que provienen de países desarrollados prefieren el sector inmobiliario, intermediación financiera, hostelería y el comercio.
En cuanto la distribución geográfica, son las grandes capitales, Madrid, Barcelona y Valencia donde encontramos casi las dos terceras partes del colectivo de emprendedores inmigrantes. |